31 May Protege tu hogar con las manillas Hamburgo
Las manillas Hamburgo te permitirán aumentar la seguridad y proteger tu hogar. La manilla Hamburgo para ventanas y balconeras ofrece un estándar completamente nuevo en resistencia al robo.
¿Cómo protege la manilla Hamburgo tu hogar?
Cuando la ventana está cerrada o abatida, el asa y el cuadradillo están desacoplados y la manilla se bloquea automáticamente. Esto hace que la ventana o la balconera se quede protegida ante la apertura no autorizada de una ventana desde el exterior.
Las manillas Hamburgo limitan al máximo las opciones de manipular las ventanas. Y no sólo contra el accionamiento de la ventana desde el exterior, sino también contra los métodos de penetración a través del vidrio o perforación del marco para poder ser capaz de girar la manilla de la ventana desde el exterior.
Estas son las ventajas de las manillas Hamburgo:
- Protección contra robos
- Función de bloqueo automático cuando la ventana está cerrada o abatida
- Resistente a robos incluso cuando la ventana está abatida
- Imposible de ser abierto por los niños
Empujar para girar
El bloqueo y desbloqueado de las manillas es muy sencillo. Basta con empujar para hacer girar la manilla. Para abrir la ventana lo primero que hay que hacer es empujar la manilla en la dirección de la roseta. Esto hará que se libere el bloqueo y el mango se pueda girar de manera habitual. Al cerrar o abatir la ventana, el mango está bloqueado, y solo se puede operar empujándolo de nuevo.
El principio de “empujar para girar” existe desde hace mucho tiempo. Es usado, por ejemplo, en botellas a prueba de niños para materiales peligrosos como medicamentos y productos de limpieza, para hacer el contenedor virtualmente imposible de ser abierto por los niños, y protegerlos contra las lesiones que puedan ser causadas por el contenido de la botella.
En resumen, las asas de las manillas Hamburgo están desacoplados y bloqueados cuando la ventana está cerrada o abatida, lo que significa que el asa y el cuadradillo no están conectados. Un ladrón puede ser capaz de alcanzar el magno perforando el sello de vidrio o perforando el marco y romper la roseta usando fuerza física masiva, sin embargo, el eje no se moverá. Resultado: la ventana no se puede abrir y el intento de robo habrá fallado.